REGALAR FLORES EN OTOÑO – APROVECHAMIENTO
Para decorar, para regalar, para hacer guirnaldas… y también para degustar. Las flores se han convertido en los últimos tiempos en un “must” de la cocina creativa, pero lo cierto es que el ser humano lleva consumiéndolas desde casi el principio de los tiempos. Si crees que tú no has comido nunca una, quizá sea porque desconoces que alcachofas, brócolis o coliflores son en realidad flores aunque las conozcamos como hortalizas. Eso por no hablar de que, si te gustan las infusiones, en muchos casos están hechas con pétalos de flores.
El uso de flores en la cocina con intenciones alimenticias y no meramente decorativas ha sido documentado ya en varios recetarios de la Antigüedad, sobre todo en los hallados en Oriente. La cocina india es una de las que con más frecuencia incluye flores en sus platos, seguida de la griega, aunque su uso se va extendiendo poco a poco, muy especialmente debido al gusto de la llamada “nouvelle cuisine” por experimentar con nuevos sabores e ingredientes. Los chefs actuales han encontrado en el mundo floral todo un territorio por explorar con nuestras papilas gustativas y así hemos pasado de las tradicionales flores (como el azafrán o la flor del calabacín) a otras más exóticas y desconocidas.
Antes de lanzarte a cortar flores de tus macetas para usarlas en tus recetas, es buena idea averiguar qué flores son comestibles. Se considera que una flor puede ser consumida por el ser humano cuando no hay riesgo alguno de intoxicación. Así, son flores comestibles muy comunes las de manzanilla, crisantemo,margarita, geranio, lavanda, lirio, hibisco, lila, jazmín, madreselva, pensamiento, caléndula y, por supuesto, las rosas.
Si tú también quieres experimentar con los sabores de las flores en la cocina has de saber que se pueden preparar en tempura, usarse como infusión, como ingrediente de bizcochos, galletas y salsas, cristalizarlas para que sirvan de decoración comestible para tartas y preparar jaleas y mermeladas con ellas. De hecho, las mermeladas de flores (como las de violetas o de rosas) son muy comunes en algunos países (sobre todo del Este de Europa) y fáciles de preparar. Por eso, hoy te traemos una receta base de mermelada de flores para que la prepares con las del otoño.
Pero antes de empezar, dos consejos: es preferible que prepares las mermeladas con flores que hayas cultivado en casa (si lo haces con flores de floristería, lávalas muy bien antes para retirar cualquier posible resto de pesticidas, igual que harías con una lechuga de supermercado), mientras que el momento óptimo del día para recolectarlas es primera hora de la mañana.
Ahora sí, vamos allá con la receta.
Receta básica para preparar mermelada con flores de otoño
NOTA: Para preparar cualquier mermelada de flores, usaremos manzana como base. Esto lo hacemos porque la manzana da cuerpo a la mermelada y además permite que los aromas y sabores de las flores que escojamos prevalezcan sobre el suyo. Es lo más parecido a una base neutra.
Ingredientes: 1 kilo de manzanas, ½ kilo de azúcar (blanca o morena, a vuestro gusto), uno o dos puñados de pétalos de la flor o flores comestibles que hayáis escogido (dependiendo de si queréis que el sabor sea más o menos intenso), 2 cucharadas de postre de agua de azahar (opcional), esencia de la flor que hayáis escogido (opcional).
Preparación: Pela y trocea las manzanas en porciones pequeñas para que se cuezan más fácilmente. Ponlas en una olla, agrega el azúcar y pocha a fuego lento, sin dejar de remover para que el azúcar no se queme ni se pegue. Una vez hayan adquirido textura de pasta, agrega los pétalos lavados de las flores y remueve bien hasta que la mermelada espese y adquiera la textura deseada. Como truquillo, te recomendamos que tritures la manzana antes de añadir los pétalos deflores, para que la textura sea de auténtica mermelada. Si no, quedará más bien como una compota.
¿Verdad que es sencillo? Si te gustan las mermeladas de flores, con esta receta podrás tenerla siempre a mano, ya que a veces no son fáciles de encontrar en el mercado. Nosotros te sugerimos que la prepares con caléndula, crisantemo o hibisco, ahora que está a punto de terminar su floración.
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