REGALAR PLANTAS DE NAVIDAD – CUIDADOS

Se acerca la Navidad y puede que encuentres una planta como regalo bajo tu árbol o que seas tú quien tenga el detalle. Aprende a cuidar las plantas navideñas para que duren mucho, mucho tiempo

¿Alguna vez te han regalado una planta por Navidad? Acebo, ardisias, ciclamenes o flores de Pascua son las más comunes para regalar en estas fechas y también en esta época del año porque están en plena temporada. Todas ellas pueden sobrevivir muy bien más allá de la Navidad pero, sin embargo, existe la creencia generalizada de que se trata de plantas que mueren una vez pasado el invierno.

Esta creencia errónea se debe, fundamentalmente, a un mal entendimiento de lo que significa “planta de temporada”. En este caso, lo que queremos decir cuando hablamos de planta de temporada es que las mismas tienen un periodo concreto de floración y esplendor. Pasado éste, vivirán – como plantas verdes en su mayoría – con nuestros cuidados hasta la siguiente temporada de floración. Si quieres aprender a conservar y prolongar la vida de tus plantas de Navidad, presta atención a sus cuidados.

FLOR DE PASCUA

Las Plantas de Navidad son mucho más longevas de lo que habitualmente pensamos. El hecho de que se encuentren en su mejor momento en esta época del año y luego empiecen a perder sus brácteas no quiere decir que se haya marchitado, sino que está siguiendo su ciclo natural. La poinsettia es una planta de interior, que requiere de buena iluminación sin sol directo, riegos de raíz una o dos veces a la semana, ambientes poco secos y no cercanos a la calefacción y protección contra las corrientes de aire. Una vez haya pasado su época de esplendor, podaremos la Flor de Pascua (cuando haya perdido casi todas sus brácteas) dejando los tallos con un largo de entre seis y ocho centímetros. Cuidando que no quede a merced de las heladas, cuando haga calor es buena idea sacarla a la terraza o la ventana para que reciba más luz. La regla clave es: doce horas de luz, doce de oscuridad (para lo que podemos meter la poinsettia en una caja bien tapada). De este modo, la planta se regenera y recuperará su follaje.

ARDISIA

Parecida al acebo en tanto en cuanto ambas presentan atractivos frutos rojos en forma de bola, la ardisia es sin embargo un arbusto fundamentalmente para interior (puede vivir en el exterior siempre y cuando no haya heladas). En Navidad resulta muy decorativa y original para regalar, pues no es la típica planta navideña que todos conocemos. La ardisia necesita luz en abundancia y vive mejor si la colocamos cerca de una ventana bien iluminada. Si la tenemos dentro de casa, habremos de procurar que la temperatura no sea ni demasiado cálida, ni demasiado fría, aunque prefiere el fresco. En cuanto a los riegos, necesitará que pulvericemos las hojas periódicamente, así como más riego en verano que en invierno. Hacia finales de verano florece en racimos blancos, de los que surgen en otoño sus llamativos ramilletes de frutos rojos.

CICLAMEN

Delicada y con una curiosa y vistosa flor que crece de forma invertida, el ciclamen es una planta de invierno que, por su colorido, se ha convertido en una de las más demandadas en Navidad. Para que te dure más allá de estas fechas, recuerda que necesita aire fresco, agua con moderación y un buen drenaje para evitar encharcamientos, así como luz indirecta pero abundante. En los meses de verano, desde mayo principalmente, comenzará el periodo vegetativo de la planta. Debemos cuidar de no regarla y dejarla reposar, hasta que volvamos a hacerlo a partir de septiembre, más o menos.

ACEBO

Para los amantes de las plantas de exterior, la mejor planta navideña es el acebo. Es típica, es bonita y nos dará muchas alegrías si nos dedicamos un poco a ella. El acebo necesita estar en zona de semisombra y requiere bastante agua para desarrollarse adecuadamente (especialmente en verano, en invierno podemos espaciar más los riegos, sobre todo si está a la intemperie y recibe agua de lluvia), así como evitar encharcamientos y procurarle un buen drenaje. Lo bueno es que tolera bien el frío (para algo es una planta navideña y de invierno), así que lo único que tendremos que hacer sera acolchar bien el suelo en invierno y cuidar que las raíces no sufran a causa de las heladas.

KALANDIVA

Esta bonita planta de interior florece principalmente en otoño y en invierno, en general durante los días cortos del año. Cuídala adecuadamente proporcionándole una cantidad moderada de luz, preservándola de las temperaturas bajas y las heladas, así como manteniendo un ambiente más o menos húmedo, sin pulverizar las hojas y procurando no regarla en exceso. Las kalandivas necesitan un drenaje bueno, de modo que el agua no se quede estancada. ¿Sabías que se trata de una planta surgida a partir de una mutación de los kalanchoes?

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