TERRARIOS EN TARROS DE COCINA

Las crasas y cactus, además de ser plantas ideales para personas que no tienen mucho tiempo para dedicarles o se quejan de tener poca mano con las plantas en general, también se han puesto muy de moda en decoración.

Hoy te enseñamos a crear bonitos terrarios artesanales en tarros de cocina, una actividad ideal para hacer con los más pequeños y que, además de darte como resultado un elemento decorativo de lo más original, también te va a solucionar más de un regalo cuando veas lo bonitos que quedan. Vamos allá.

Paso 1 – Reunimos el material:

• Varios tarros de cristal (sirven los de conservas, mayonesa… si son de tamaños variados, mejor)
• Tierra (sustrato) especial para cactus (si tienes tierra normal para plantas también sirve).
• Piedrecitas (si son de colores, mejor)
• Guantes de jardinería.
• Una cuchara grande.
• Unas tijeras.
• Cactus y plantas crasas a vuestro gusto.

Paso 2 – Preparamos los frascos: antes de crear nuestros terrarios, para decorar en casa o para regalar (porque cuando tu familia y amigos vean lo bonitos que os quedan, todos querrán uno), tenemos que acondicionar los tarros en los que pondremos las plantas. Para ello, los fregamos bien y les retiramos las etiquetas (para que las plantas se vean bien).

Paso 3 – Preparamos el sustrato: las plantas crasas, suculentas y los cactus tienen como característica común que necesitan poca agua, tierra muy suelta y poca humedad – evitando siempre el encharcamiento – en la raíz, si queremos que se mantengan lozanas. Para conseguir esto en unos tarros que no tendrán agujeros de drenaje en la base, necesitamos poner primero una cama de piedrecitas, que esponjen y creen una barrera entre el agua que se deposita en el fondo y las raíces de la planta (cuando vaya creciendo). Después echaremos sustrato, llenado el bote más o menos hasta la mitad (si es tierra normal para plantas, procura que no quede demasiado compacta).

Paso 4 – Plantamos: con el sustrato preparado, vamos a plantar nuestros cactus y suculentas. Dependiendo de los amplio que sea el tarro podrás poner más o menos. Te recomendamos que trasplantes cactus y crasas pequeños y que no llenes demasiado el tarro, porque necesitarán espacio para crecer y desarrollarse. Teniendo esto en cuenta, combina como más os guste. Si usáis cactus, procura manipularlos tú o asegurarte de que los niños se ponen bien los guantes y no tocan las púas con las manos desprotegidas. Las crasas puedes plantarlas cortando el tallo cerca de la base de las hojas, ya que enseguida volverán a echar raíz.

Paso 5 – Decoramos: una vez tenemos plantadas nuestras crasas y cactus, vamos a decorar el terrario. Tanto por dentro (con piedrecitas que simulen el campo, o con picks caseros que nos sirvan tanto para escribir la especie de planta que hemos colocado como simplemente para ornamentar, como picks de mariposas, flores…) como por fuera. Con cuerda o cinta de colores podemos hacer diferentes lazos en la embocadura de los frascos, de los colores que más nos gusten. Podemos añadir botones, cuentas… deja que los niños imaginen y hagan.

Coloca tus terrarios en una zona de la casa en la que reciban luz natural y recuerda no regarlos demasiado. Deja que el sustrato se seque entre riego y riego y enseña a los más pequeños cómo se hace, para que puedan ayudarte y vean cómo evolucionan sus plantas.

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